El detector de incendios es la manera más eficaz de avisarnos de un incendio en su fase más inicial, permitiendo tomar medidas para controlar el fuego, facilitar la evacuación y actuar sobre el sistema de extinción.
Este sistema se instala en cualquier ámbito constructivo, desde oficinas, industrias, edificios públicos, residenciales, comerciales, y es altamente recomendable en el hogar.
Sistemas Analógicos
Los sistemas más avanzados permiten conocer la ubicación exacta del elemento que detecta fuego, y establecer la secuencia de actuación que más interese en cada caso: evacuación de una planta, evacuación total. Interactua con otros sistemas: corte de la climatización, del suministro de gas, aviso a la central receptora de alarmas.
Funcionamiento del sistema de detección automática
El detector se activa en presencia de humo, llama o incremento de temperatura, según el diseño de la instalación, enviando una señal al panel o central de detección.
Si el fuego se propaga, se van activando los detectores que se encuentren en el radio de acción del incendio.
La central nos informa de dónde está el incendios, activa las sirenas, activa la evacuación y transmite la señal remotamente.
Los pulsadores se activan manualmente para avisar de la existencia de un incendio.